17 de julio - Desde mediados de marzo, la Sede de las Naciones Unidas ha operado con una ocupación máxima de 200 a 300 personas por día, con una gran mayoría del personal de la Organización trabajando a distancia debido a la pandemia de COVID-19.
El 20 de julio, como parte de la vuelta gradual del personal a las instalaciones de la ONU, la ocupación máxima ha aumentado a 400 personas, aproximadamente el 10% de la ocupación habitual anterior a la pandemia. La sede está ya lista para dar la bienvenida a determinados grupos de su personal.
A principios de esta semana visité las instalaciones por primera vez en cuatro meses para comprobar las medidas de seguridad y salud vigentes durante la Fase 1. Aquí está mi relato, paso a paso, de lo que experimenté desde mi entrada a mi salida, fotografiado por mi colega de la unidad de FOTOS ONU, Manuel Elías.
Fue una buena experiencia el regresar. Lo primero que vi fueron los requisitos de seguridad relacionados con el COVID-19 en la entrada del personal situada en la calle 42.
Allí me pidieron que descubriera mi rostro tapado por la mascarilla y les mostrara un pase válido de la ONU para ayudarles a confirmar mi identidad. Y todo ello... sin esperas en la cola.
Tras pasar mi identificación de la ONU por el lector, confirmé que cumplía con los requisitos de seguridad de la ONU y caminé por unas puertas ya abiertas para evitar tocarlas.
Seguí las se?ales unidireccionales que indican el camino de entrada. El edificio de la Secretaría, y con él la ONU en su 75? aniversario, mantienen la cabeza alta sin temblar ante la tempestad del COVID-19.
Giré a la derecha hacia el corredor que conecta la Secretaría y el edificio de la Biblioteca Dag Hammarskj?ld. Esta es una nueva entrada a los edificios. Pero encontrará algo más allí: una nueva estación de lavado de manos.
No hay puerta giratoria en esta nueva entrada lateral; Otra entrada que no requiere contacto con las puertas. Fue la primera vez que pasé por este acceso en toda mi carrera en la ONU.
Seguí las pegatinas que indican el camino unidireccional en el vestíbulo de la Secretaría, y contemplé por la ventana la vista dominante del East River y Long Island City.
Las etiquetas de distanciamiento físico se han colocado cuidadosamente en todas partes. Pude ver mi reflejo en un suelo completamente brillante, prueba del trabajo "entre bambalinas" realizado por el personal de limpieza y mantenimiento de las instalaciones. GRACIAS.
Necesité mantener mi rostro cubierto en todas las áreas públicas del edificio y mientras utilicé el ascensor, el cual tiene una ocupación máxima de dos personas.
Salí del ascensor a una planta con un área de trabajo flexible; Las reglas de tráfico unidireccional se aplican aquí también.
Las salas de reuniones tienen recordatorios sobre el mantenimiento de la distancia social y carteles en el exterior que indican sus capacidades máximas. Sin embargo, durante la Fase 1, no se permiten reuniones cara a cara.
Tráfico unidireccional nuevamente, ahora en el lado este del edificio. No se pueden usar estaciones de trabajo en el lado oeste del edificio ya que el espacio es demasiado estrecho.
Las sillas en los escritorios que no se van a utilizar están unidas y metidas debajo de los escritorios para garantizar el distanciamiento físico mientras estamos en el trabajo. Las pegatinas también están ahí para recordárnoslo.
Los artículos de limpieza se encuentran en áreas comunes. Utilicé toallitas desinfectantes para limpiar el equipo al comienzo y al final de mi jornada.
Con el distanciamiento físico, y nadie sentado cerca o frente a usted, no es necesario usar una máscara en las estaciones de trabajo. La oficina estaba bastante vacía, y se espera que permanezca igual durante la Fase 1.
Amplio espacio para mantener el distanciamiento físico de los colegas. El aire acondicionado era adecuado, el sistema HVAC se ha configurado para maximizar la circulación del aire exterior en el edificio. Al mediodía, el 100% de este aire exterior se expulsa a través del edificio durante aproximadamente 30 minutos, o el mayor tiempo posible, mientras se mantiene una temperatura confortable. Esto se repite todas las tardes durante una hora.
Recuerde siempre volver a cubrirse la cara si se levanta de su espacio de trabajo para ir a la nevera, al ba?o o para moverse por el edificio. Las cafeterías están cerradas. ?Traiga su propio almuerzo! Si se le olvida, solo le quedan...
... los aperitivos de las máquinas expendedoras.
Esté atento a las se?ales y siga las flechas para minimizar cruzarse con otras personas.
Listo para ir a casa por otra puerta abierta.
Saliendo por la Primera Avenida y dando gracias a todos esos compa?eros que ejercen su trabajo físicamente en la sede de la ONU o en otros campus de la ONU en todo el mundo.