En este d¨ªa rendimos homenaje a todas las personas asesinadas, reflexionamos sobre el sufrimiento padecido y reconocemos la resiliencia de quienes sobrevivieron. Unidos en solidaridad con el pueblo de Rwanda, debemos dirigir una mirada muy atenta al mundo actual y asegurarnos de que hemos aprendido las lecciones de hace 27 a?os.Secreterio General de las Naciones Unidas
? 27? aniversario
Conmemoraci¨®n de 2021: 27¡ã aniversario del genocidio en Rwanda
D¨ªa Internacional de Reflexi¨®n sobre el Genocidio de 1994 contra los Tutsis en Rwanda
Mensaje del Secretario General para 2021
Es un honor para m¨ª participar en los actos conmemorativos del D¨ªa Internacional de Reflexi¨®n sobre el Genocidio de 1994 contra los Tutsis en Rwanda.
Han pasado 27 a?os desde que m¨¢s de un mill¨®n de personas fueron sistem¨¢ticamente asesinadas en menos de tres meses en Rwanda.
Las v¨ªctimas eran en su mayor¨ªa tutsis, pero entre ellas tambi¨¦n hab¨ªa hutus y otros que se opon¨ªan al genocidio.
Aquellos d¨ªas de 1994 permanecen en nuestra conciencia colectiva como de los m¨¢s horrendos de la historia reciente de la humanidad.
En este d¨ªa rendimos homenaje a todas las personas asesinadas, reflexionamos sobre el sufrimiento padecido y reconocemos la resiliencia de quienes sobrevivieron.
Unidos en solidaridad con el pueblo de Rwanda, debemos dirigir una mirada muy atenta al mundo actual y asegurarnos de que hemos aprendido las lecciones de hace 27 a?os.
Hoy en d¨ªa, en todo el mundo, hay personas que se ven amenazadas por grupos extremistas decididos a engrosar sus filas mediante la polarizaci¨®n social y la manipulaci¨®n pol¨ªtica y cultural.
Esos movimientos extremistas representan la principal amenaza en materia de seguridad en muchos pa¨ªses.
Aunque la tecnolog¨ªa y las t¨¦cnicas que utilizan los extremistas est¨¢n evolucionando, los mensajes y la ret¨®rica infames siguen siendo los mismos.
La deshumanizaci¨®n de las comunidades, la informaci¨®n err¨®nea y el discurso del odio est¨¢n atizando el fuego de la violencia.
La pandemia de COVID-19 pone de relieve la necesidad urgente de abordar divisiones cada vez m¨¢s profundas.
La crisis sanitaria mundial ha afectado profundamente a todo el conjunto de los derechos humanos en todas las regiones, provocando m¨¢s discriminaci¨®n, m¨¢s polarizaci¨®n social y m¨¢s desigualdades ¡ªtodo lo cual puede desembocar en violencia y conflictos.
Vimos lo que ocurri¨® en Rwanda en 1994 y conocemos las atroces consecuencias que sobrevienen cuando se permite que prevalezca el odio.
Para impedir que la historia se repita es necesario contrarrestar esos movimientos impulsados por el odio que se han convertido en una amenaza transnacional.
Debemos redoblar nuestros esfuerzos, adem¨¢s de forjar una Agenda Com¨²n, para renovar y revitalizar nuestra acci¨®n colectiva en el futuro.
Para ello, debemos defender los derechos humanos y seguir impulsando pol¨ªticas que respeten plenamente a todos los miembros de la sociedad.
Rwanda vivi¨® uno de los cap¨ªtulos m¨¢s dolorosos de la historia moderna de la humanidad, pero su pueblo ha renacido de las cenizas.
Tras sufrir violencia de g¨¦nero y discriminaci¨®n indescriptibles, las mujeres rwandesas ocupan ahora m¨¢s del 60 % de los esca?os del parlamento, lo que convierte a Rwanda en l¨ªder mundial a este respecto.
El pueblo de Rwanda nos ha mostrado el poder de la justicia y la reconciliaci¨®n, as¨ª como la posibilidad de progreso.
En este D¨ªa solemne, compromet¨¢monos todos a construir un mundo inspirado por los derechos humanos y la dignidad para todos.
—Ant¨®nio Guterres