EL SECRETARIO GENERAL
---
MENSAJE EN EL DIA INTERNACIONAL DE LA PAZ
Nueva York, 21 de septiembre de 2002La campana de la paz en la sede de Naciones Unidas, producto de la fundición de monedas donadas por niños de todos los continentes, es un símbolo de solidaridad global. Un regalo de Japón, es también un recordatorio del costo humano de la guerra.
«Larga vida a la paz mundial absoluta», reza la inscripción en su costado. Cada año en el Día Internacional de la Paz, la gente en todo el mundo se reúne para reiterar ese sentimiento, para recordar a las víctimas del conflicto, y para rededicarse ellos mismos a la búsqueda -tan antigua como el tiempo- de construir un mundo más seguro y más justo.
Este año marca el comienzo de una nueva tradición en el día de la paz. La Asamblea General ha decidido que de ahora en adelante, el Día Internacional de la Paz será conmemorado cada año el 21 de septiembre, como "un día de cese al fuego y no-violencia global". Por lo tanto, llamo a todas las naciones y a todos los pueblos a suspender todas las hostilidades durante el día entero.
Veinticuatro horas: para dar a los trabajadores de socorro un seguro interludio para la provisión de servicios vitales; para ofrecer a los mediadores un bloque en construcción hacia una tregua más amplia; para permitir a todos aquellos involucrados en el conflicto reconsiderar la "sensatez" de la violencia ulterior.
Veinticuatro horas: un tiempo no muy largo pero suficiente para que los líderes del mundo comiencen a escuchar a sus pueblos. Algunos de esos pueblos quieren un fin a la represión y a la intolerancia - y lo dirían públicamente si pudieran ejercer sus derechos y libertades fundamentales. Otros desean alivio frente a la pobreza y la desesperanza, y lo dirían a gran voz si no estuvieran tan cargados con la lucha diaria de proveer alimento y techo para sus familias.
Los líderes tienen la responsabilidad especial de escuchar el mensaje del Día Internacional de la Paz. Que resuene a lo largo y a lo ancho.
Traducción no oficial del Centro de Información de las Naciones Unidas para Argentina y Uruguay. Buenos Aires, 17 de septiembre de 2002.