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Las sociedades justas hacen realidad los derechos humanos, sin dejar a nadie atr¨¢s. Esa es la promesa central de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Todo el mundo debe tener alimentos suficientes, as¨ª como atenci¨®n sanitaria y educaci¨®n de calidad. Debe ponerse fin a todo tipo de discriminaci¨®n. Una sociedad justa comienza en la vida cotidiana. En todo lo que hagas, s¨¦ justo. S¨¦ amable. S¨¦ generoso.

Defiende la igualdad de g¨¦nero

Contrata a una mujer por el mismo salario que a un hombre. Diles a todos tus conocidos que no hay justicia sin la justicia de g¨¦nero. Enorgull¨¦cete de ser feminista. Defiende los derechos LGBTQI. Desaf¨ªa los estereotipos de los medios de comunicaci¨®n. Rechaza el lenguaje sexista. La vida cotidiana est¨¢ llena de oportunidades para avanzar en la igualdad de g¨¦nero, y se necesitan todas, y muchas m¨¢s. Al ritmo actual de progreso hacia la igualdad, se necesitar¨¢n no solo a?os, sino siglos para cerrar todas las brechas de g¨¦nero. No lo olvidemos: ning¨²n pa¨ªs ha alcanzado la igualdad de g¨¦nero. Inf¨®rmate sobre la evoluci¨®n de tu pa¨ªs al respecto y ¨²nete a los defensores que piden un cambio m¨¢s r¨¢pido.

Educa a los ni?os acerca de la igualdad

Los ni?os adquieren ideas sobre el mundo, literalmente, desde el d¨ªa en que nacen. S¨¦ un buen modelo de igualdad y justicia en tu forma de hablar y comportarte: los ni?os imitar¨¢n lo que haces. Esc¨²chalos y an¨ªmales a pensar en c¨®mo los dem¨¢s pueden verse o vivir de forma diferente. Supervisa las redes sociales y otros medios de comunicaci¨®n, e incluso libros y juguetes, para evitar los que transmiten estereotipos de g¨¦nero, raciales o de otro tipo. Ten en cuenta que los clich¨¦s de g¨¦nero pueden limitar tanto a los ni?os como a las ni?as.

Patrocina una beca

Si tienes los medios, aunque sea una peque?a cantidad, financia una beca para ayudar a un ni?o con dificultades a completar su educaci¨®n. Tambi¨¦n puedes colaborar con tu empresa para recaudar fondos, o incluso adoptar un enfoque de financiaci¨®n colectiva. Puedes optar por financiar la educaci¨®n general o elegir un tema que te interese, como la m¨²sica o las ciencias. Puedes completar tu generosidad econ¨®mica ofreciendo tambi¨¦n parte de tu tiempo. Un encuentro con los becarios puede servir para orientarles y permitirte ver de primera mano los resultados de tu generosidad.

Recauda fondos para escuelas

Organiza una recaudaci¨®n de fondos para escuelas, en tu propia comunidad o en otros lugares, que luchen por mantener las necesidades de los estudiantes, incluyendo el aprendizaje en l¨ªnea. Si a tus hijos les sobra material escolar, uniformes o dispositivos digitales, busca la forma de donarlos. Explora la posibilidad de un intercambio educativo que pueda conectar tu escuela local con una de otro pa¨ªs para que los ni?os puedan aprender los unos de los otros y apoyarse mutuamente. La mayor¨ªa de los ni?os del mundo van hoy a la escuela primaria, pero una de cada cuatro escuelas carece de elementos b¨¢sicos como electricidad y agua potable, esenciales para un aprendizaje de calidad. La mitad de los alumnos del mundo no tienen ordenador en casa.

Ayuda a un banco de alimentos

Aunque un tercio de los alimentos producidos para el consumo humano acaba en la basura, el hambre va en aumento. Comprom¨¦tete a no desperdiciar alimentos en tu propia cocina, donando regularmente el excedente de latas y productos de tu despensa a un banco de alimentos local. Hazte voluntario para cocinar o distribuir alimentos. S¨²mate a la defensa de la inversi¨®n en mejores sistemas alimentarios para los pa¨ªses m¨¢s pobres, donde el 40 % de las p¨¦rdidas de alimentos se producen despu¨¦s de la cosecha por razones como un almacenamiento deficiente.

Trabaja en tu autocuidado

Es sencillo. Cu¨ªdate. Procura acabar pronto de trabajar. Sal a dar un paseo. Duerme hasta que te despiertes. Planta un jard¨ªn o haz cualquier otra cosa que alegre tus d¨ªas. Ser¨¢s m¨¢s feliz y estar¨¢s m¨¢s sano. Nuestro mundo de ritmo apresurado y fren¨¦tico necesita desacelerar, y el punto de partida puede estar en cada uno de nosotros. Haz del autocuidado una pr¨¢ctica habitual y, aunque te sientas estresado, podr¨¢s sobrellevarlo mejor. Los distintos pilares del autocuidado son el mental, el emocional, el f¨ªsico, el medioambiental, el espiritual, el recreativo y el social. Elige aquello que te funcione mejor.

Defiende una atenci¨®n sanitaria de calidad

Suma tu voz al llamamiento mundial a una cobertura sanitaria universal y una atenci¨®n de calidad que la poblaci¨®n pueda permitirse. Muchos grupos de la sociedad civil se encargan de estos temas: haz donativos para estos grupos o aporta tu tiempo o tus conocimientos como voluntario. Da un paso al frente por una mejor atenci¨®n sanitaria en general o busca un tema que sea importante para ti, como el c¨¢ncer o la vacunaci¨®n infantil. La pandemia nos lo demostr¨®: la atenci¨®n sanitaria est¨¢ mejorando, pero a¨²n tiene mucho camino por recorrer. A pesar de la creciente demanda de atenci¨®n, la mayor¨ªa de los sistemas sanitarios no estuvieron preparados. Ahora es el momento de que los sistemas sanitarios p¨²blicos y privados se preparen. Por ejemplo, en los pr¨®ximos diez a?os el mundo necesitar¨¢ 10 millones m¨¢s de trabajadores sanitarios al d¨ªa para seguir el ritmo.

Aprende y ayuda a reducir los estigmas de la salud mental

Muchas personas sufrir¨¢n alg¨²n tipo de problema mental en alg¨²n momento de su vida. Pero, debido al estigma, muchos de nosotros lo padeceremos en silencio. Los costes son tr¨¢gicos: cada 40 segundos alguien muere por suicidio en alg¨²n lugar del mundo. Si te sientes c¨®modo, habla abiertamente con tus amigos y familiares sobre tu salud mental, como har¨ªas con cualquier otro problema de salud. No te quedes callado frente a comentarios desalentadores o discriminatorios, y busca tratamiento si lo necesitas. F¨®rmate y toma conciencia de los riesgos para tu salud mental y la de tus seres queridos, y busca informaci¨®n sobre los recursos a los que puedes acceder si necesitas ayuda.

Defiende la accesibilidad y la inclusi¨®n

Promover un entorno inclusivo es esencial para garantizar los derechos de todas las personas. En todo el mundo, 1300 millones de personas, aproximadamente el 16 % de la poblaci¨®n, tienen alg¨²n tipo de discapacidad, y no todas son obvias o f¨¢ciles de ver. Sin embargo, las personas con discapacidad suelen ser objeto de discriminaci¨®n y exclusi¨®n. T¨² puedes cambiar la situaci¨®n. Aboga por espacios inclusivos y accesibles, ya sean f¨ªsicos o en l¨ªnea. All¨¢ donde est¨¦s, hazte o¨ªr cuando seas testigo de cualquier forma de discriminaci¨®n.

Conoce tus derechos

La mayor¨ªa de los pa¨ªses se han comprometido con las normas de derechos humanos y las han plasmado en leyes nacionales, por ejemplo, garantizando los derechos a la salud y la educaci¨®n, y estableciendo protecciones contra la violencia de g¨¦nero. Inf¨®rmate sobre qu¨¦ instrumentos de derechos humanos ha ratificado tu pa¨ªs y participa en las convocatorias para su implantaci¨®n y seguimiento. Un punto de partida puede ser tu propia localidad; algunos municipios han trasladado normas internacionales a la legislaci¨®n local.