Mensaje del Secretario General en el D铆a de los Derechos Humanos
10 de diciembre de 2010
Los derechos humanos son la base sobre la que se sustentan la libertad, la paz, el desarrollo y la justicia, y constituyen uno de los pilares de la labor de las Naciones Unidas en todo el mundo.
Las leyes de protecci贸n y promoci贸n de los derechos humanos son indispensables, pero, con frecuencia, el progreso depende de las personas: mujeres y hombres valientes que luchan por proteger sus derechos y los derechos de los dem谩s y se empe帽an en hacer de los derechos una realidad en la vida de las personas.
Este a帽o, dedicamos la celebraci贸n del D铆a de los Derechos Humanos a los defensores de estos derechos.
Se trata de un grupo muy variado de personas. Algunas pertenecen a organizaciones de la sociedad civil, otras son periodistas o incluso ciudadanos particulares que se deciden a actuar tras presenciar abusos que los afectan directamente.
A todas ellas, sin embargo, las une el compromiso de denunciar los abusos, proteger a los m谩s vulnerables y poner fin a la impunidad. Estas personas tienen el coraje de levantar su voz contra las injusticias, hoy en d铆a incluso por Twitter, en nombre de la libertad y la dignidad humana.
Los defensores de los derechos humanos desempe帽an un papel fundamental en la lucha contra la discriminaci贸n. Investigan las violaciones y ayudan a las v铆ctimas a obtener justicia y apoyo.
Con demasiada frecuencia, su trabajo los coloca en una situaci贸n sumamente arriesgada.
Muchos defensores de los derechos humanos sufren acoso, pierden su trabajo o son injustamente encarcelados. En muchos pa铆ses, son agredidos, torturados e incluso asesinados.
Sus familiares y amigos tambi茅n son objeto de acoso e intimidaci贸n.
Las mujeres defensoras de los derechos humanos corren riesgos adicionales, y por lo tanto necesitan m谩s apoyo.
Este D铆a de los Derechos Humanos representa una ocasi贸n para rendir homenaje al coraje y los logros de los defensores de los derechos humanos en todo el mundo, y para comprometernos a hacer m谩s por proteger su labor.
Los Estados son los principales responsables de proteger a los defensores de los derechos humanos. Pido a todos los Estados que garanticen la libertad de expresi贸n y de reuni贸n que hace posible que estas personas desempe帽en su labor.
Cuando la vida de un defensor de los derechos humanos corre peligro, todos debemos sentirnos menos seguros.
Cuando se hace callar a estas personas, la justicia misma queda aniquilada.
En este D铆a de los Derechos Humanos, hallemos inspiraci贸n en quienes luchan por hacer un mundo m谩s justo y recordemos que todos, independientemente de nuestro origen, experiencia o educaci贸n, podemos ser defensores de los derechos humanos.
Utilicemos ese poder. Seamos cada uno de nosotros un defensor de los derechos humanos.