Las Naciones Unidas y Chernóbil
Desde 2004, el Administrador del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) se ha desempe?ado como Coordinador de las Naciones Unidas de la cooperación internacional para Chernóbil. El Grupo de Trabajo Interinstitucional sobre Chernóbil, compuesto por las agencias internacionales relevantes bajo el liderazgo del PNUD y los tres países afectados, constituye el mecanismo que coordina la cooperación internacional.
las actividades del sistema de las Naciones Unidas y las partes interesadas internacionales se organizaron en torno a las prioridades que se indican a continuación:
- Desarrollo comunitario;
- Provisión de información a las comunidades afectadas;
- Infraestructura ;
- Salud;
- Mitigación de la radiación y fijación de normas;
- Seguridad tecnológica nuclear y gestión de desechos radiactivos;
- Sostenibilidad ambiental ;
- Reducción del riesgo de desastres y alerta temprana.
Las Naciones Unidas han evaluado a lo largo de los a?os los efectos del accidente de Chernóbil, el apoyo proporcionado para mejorar la seguridad de la población y el medio ambiente y la recuperación de las zonas afectadas por el accidente. La experiencia adquirida hasta la fecha indica que las actividades de recuperación del desastre de Chernóbil deben estar vinculadas con la Agenda 2030 y ser plenamente acordes con los planes nacionales de desarrollo sostenible de Belarús y Ucrania. Para hacer frente a los complejos problemas, relacionados entre sí, dimanantes del accidente nuclear es necesario eliminar los silos sectoriales y aplicar un enfoque holístico y sistémico para no dejar a nadie atrás. Los organismos de las Naciones Unidas están determinados a seguir reforzando las asociaciones estratégicas, forjando alianzas, movilizando fondos y recaudando financiación para el desarrollo de los territorios afectados por el desastre de Chernóbil.
Las comunidades y las autoridades públicas locales son cruciales para superar las consecuencias del accidente. Promover la colaboración entre todas las partes interesadas pertinentes, impulsar el diálogo y las alianzas entre las comunidades afectadas y fomentar la confianza entre las autoridades y la ciudadanía son requisitos indispensables para lograr una pronta recuperación y la resiliencia.
La comunidad internacional y los países afectados deberían continuar mejorando y cambiando la percepción para que las regiones afectadas por el desastre pasen a percibirse como regiones en recuperación. Para que continúe el desarrollo sostenible de las regiones en recuperación, los programas deberían centrarse en el desarrollo del emprendimiento local y el turismo, la creación de nuevos puestos de trabajo, la transición de las tecnologías de economías locales a las tecnologías verdes, la inclusión de los grupos vulnerables en los procesos de desarrollo local, la promoción de estilos de vida saludables y la cooperación transfronteriza en aras de la conservación de los ecosistemas en Polesia.
Los organismos de las Naciones Unidas y la comunidad internacional deberían seguir potenciando la visibilidad de los resultados logrados en las comunidades y regiones afectadas por el desastre de Chernóbil con fines de promoción. Las ense?anzas extraídas de la respuesta al accidente deberían integrarse en los programas de planificación y preparación para emergencias nucleares.
Por último, los Gobiernos de Belarús y Ucrania, los organismos de las Naciones Unidas y otros asociados deberían estudiar alianzas y mecanismos innovadores de financiación a fin de conseguir inversiones para las regiones que siguen necesitando apoyo financiero.
La recuperación y transformación de la zona afectada por el desastre sigue siendo un reto a largo plazo de enormes proporciones. Es una empresa ingente, que solamente se logrará si todos los asociados, de todos los niveles, actúan de manera concertada. El sistema de las Naciones Unidas sigue firmemente decidido a conseguir la plena recuperación y el desarrollo sostenible de la región afectada mediante enfoques innovadores, en colaboración con los Gobiernos de Belarús, la Federación de Rusia y Ucrania, y a velar por que el legado del accidente sea un entorno más seguro para la región y para todas las personas.
Fuente: Informe del Secretario General "Consecuencias que aún perduran del desastre de Chernóbil" ()