Antecedentes
El 12 de diciembre de 2012, la resolución sobre salud mundial y política exterior () recomendaba incluir la cobertura sanitaria universal en los debates de la agenda de desarrollo para después de 2015 en el contexto de los retos mundiales en materia de salud. Los Estados Miembros reconocieron la importancia de que los sistemas nacionales de salud garantizaran una cobertura universal, especialmente por medio de mecanismos de atención primaria de salud y protección social, a fin de que todos, en particular los sectores más pobres de la población, tuvieran acceso a los servicios sanitarios.
El 25 de septiembre de 2015, la resolución Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible () incorporó el logro de la cobertura sanitaria universal para 2030, incluida la protección contra los riesgos financieros, el acceso a servicios de salud esenciales de calidad y el acceso a medicamentos y vacunas inocuos, eficaces, asequibles y de calidad para todos.
El 12 de diciembre de 2017, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó una resolución sobre salud mundial y política exterior: atención de la salud de los más vulnerables en pro de una sociedad inclusiva (). En esa resolución se decidió celebrar, durante la Asamblea General de las Naciones Unidas de 2019, una reunión de alto nivel sobre la cobertura sanitaria universal (CSU). La decisión aprobada sobre estableció que el tema general de la reunión de alto nivel fuera “Cobertura sanitaria universal: Avanzar juntos para construir un mundo más sano”.
El 23 de septiembre de 2019, la reunión de alto nivel sobre la cobertura sanitaria universal supuso un logro significativo de los Estados Miembros, que reafirmaron su compromiso político de alto nivel con la CSU y respaldaron la declaración más amplia sobre salud mundial formulada hasta la fecha. Con la adopción de la Declaración política de la reunión de Alto Nivel sobre la Cobertura Sanitaria Universal () los Estados Miembros reconocen que la salud es un requisito, a la vez que un resultado y un indicador, de las dimensiones social, económica y ambiental del desarrollo sostenible y de la implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, y reiteran su firme determinación de lograr la cobertura sanitaria universal para 2030, con miras a ampliar las iniciativas emprendidas a nivel mundial para construir un mundo más saludable para todos.
En el párrafo dispositivo 78 de la declaración política, los Estados Miembros se comprometen a “aumentar la concienciación mundial, la solidaridad internacional y la cooperación y las acciones internacionales para alcanzar la cobertura sanitaria universal promoviendo marcos y foros de colaboración nacionales, regionales y mundiales, incluso conmemorando cada a?o el Día Internacional de la Cobertura Sanitaria Universal el 12 de diciembre”.
El sistema de las Naciones Unidas, los asociados para el desarrollo y otras iniciativas pertinentes, entre ellas la Alianza Sanitaria Internacional para la CSU2030, respaldan a los Estados Miembros en el desarrollo y fortalecimiento de la sostenibilidad de la cobertura sanitaria universal a escala nacional, con el fin de promover el acceso de las personas más vulnerables a los servicios de salud.
Para promover la salud y el bienestar físicos y mentales y prolongar la esperanza de vida de todas las personas, debemos lograr que la cobertura sanitaria y el acceso a una atención médica de calidad sean universales, sin excluir a nadie.