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En un importante estudio publicado hace un decenio, el Instituto Internacional del Manejo del Agua se?al¨® que, en las hip¨®tesis m¨¢s probables, el abastecimiento de agua dulce deber¨ªa ser suficiente para satisfacer las futuras demandas del sector agr¨ªcola, industrial y otros.¹ Han ocurrido muchas cosas desde entonces, lo que hace que resulte dif¨ªcil hoy en d¨ªa formular una conclusi¨®n muy precisa en t¨¦rminos tan optimistas. Ahora es evidente que, sin una mejora significativa de la gesti¨®n de recursos h¨ªdricos, ya no podemos garantizar el desarrollo sostenible ante el cambio clim¨¢tico y otras presiones conexas.

Preocupaciones relacionadas con el agua

Las crisis del agua son, sin duda, el asunto mundial m¨¢s preocupante para los l¨ªderes entrevistados recientemente por el Foro Econ¨®mico Mundial.² Adem¨¢s, de las cinco preocupaciones principales citadas, cuatro se centran en el agua o est¨¢n directamente relacionadas con ella, como por ejemplo, el ¡°fracaso de la mitigaci¨®n y adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico¡±, que ocupa el segundo lugar.³ En los ¨²ltimos a?os, se ha convertido en un truismo del trabajo de adaptaci¨®n el hecho de que los efectos del cambio clim¨¢tico afectar¨¢n a las sociedades, las econom¨ªas y el medio ambiente, principalmente a trav¨¦s del agua.

?Qu¨¦ combinaci¨®n de factores justifica un cambio de perspectiva tan radical en el transcurso de solo 10 a?os? Un asunto fundamental es el aumento de la preocupaci¨®n por la creciente escasez de agua en relaci¨®n con la demanda, impulsado por el r¨¢pido crecimiento de la poblaci¨®n, la urbanizaci¨®n y el desarrollo econ¨®mico. El cambio clim¨¢tico supondr¨¢ un desaf¨ªo en lo que respecta a la escasez, ya que el aumento de las temperaturas elevar¨¢ las tasas de evaporaci¨®n tanto de los suelos como de las superficies del agua, incrementar¨¢ las necesidades de agua para los cultivos e intensificar¨¢ la demanda de agua de refrigeraci¨®n, la cual es necesaria para generar la energ¨ªa que los consumidores demandar¨¢n en respuesta al aumento de las temperaturas.

Las perspectivas son especialmente preocupantes para las grandes zonas secas del mundo, que se pueden considerar las primeras afectadas de la adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico. En estas zonas, se ¡°prev¨¦n con toda seguridad¡± bajadas de caudal de m¨¢s del 50%, como resultado de la disminuci¨®n de las precipitaciones.⁴ Por este motivo, tambi¨¦n se reducir¨¢ la infiltraci¨®n de agua en los acu¨ªferos, lo cual supone una amenaza para las comunidades muy dependientes de las aguas subterr¨¢neas, que son especialmente dif¨ªciles de controlar y gestionar.

Es especialmente preocupante la situaci¨®n de muchas comunidades agrarias pobres de las regiones ¨¢ridas de ?frica Subsahariana y de Asia Meridional, donde existen altas tasas de pobreza rural y bajos niveles de capacidad de adaptaci¨®n que hacen que las personas sean muy vulnerables a los efectos producidos por la reducida disponibilidad de agua. Asimismo, en muchas regiones fr¨¢giles del Oriente Medio y de ?frica Septentrional, se prev¨¦ que el cambio clim¨¢tico empeore de manera significativa la escasez de agua, algo que puede considerarse un factor de perturbaci¨®n que acrecienta los riesgos de conflicto y de migraci¨®n.⁵

El doble desaf¨ªo de la seguridad h¨ªdrica

No obstante, el aumento de la preocupaci¨®n por la escasez de agua simplifica en exceso el desaf¨ªo. El cambio clim¨¢tico provocar¨¢ no solo una menor disponibilidad del agua en muchos lugares, sino tambi¨¦n un abastecimiento cada vez m¨¢s variable e impredecible. El aumento de la frecuencia y la gravedad de las sequ¨ªas y las inundaciones, con graves consecuencias para las naciones ricas y pobres, ya ha empezado a ponerse de manifiesto y est¨¢ causando estragos en los medios de subsistencia y los modelos tradicionales de producci¨®n.

Cada vez est¨¢ m¨¢s claro que la seguridad h¨ªdrica deber¨ªa ser el centro de nuestros esfuerzos. El desaf¨ªo no es solo garantizar que haya agua suficiente, sino tambi¨¦n gestionarla de manera eficaz cuando hay demasiada agua en el lugar y el momento equivocados o cuando esta es de mala calidad. Nuestro doble objetivo debe ser aprovechar el potencial productivo del agua y frenar su poder destructivo. En primer lugar, debemos asegurarnos de que la cantidad y la calidad del agua son suficientes para cumplir las necesidades humanas y las exigencias medioambientales y, en segundo lugar, de que los riesgos relacionados con el agua para las sociedades, las econom¨ªas y los ecosistemas se mantienen dentro de unos l¨ªmites razonables.

Lamentablemente, las acciones se est¨¢n quedando por detr¨¢s del aumento de la concienciaci¨®n sobre los riesgos relacionados con el agua y sus implicaciones para el crecimiento sostenible. Como consecuencia, existe el peligro de que las medidas para mejorar la gesti¨®n de los recursos h¨ªdricos no est¨¦n a la altura del desaf¨ªo. El Decenio Internacional para la Acci¨®n, ¡°Agua para el Desarrollo Sostenible¡±, 2018-2028, declarado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, es una oportunidad para conseguir que los esfuerzos nacionales e internacionales asuman el desaf¨ªo permanente de la seguridad h¨ªdrica.

La experiencia reciente en muchos pa¨ªses indica que existe una manera viable de proceder hacia una mayor resiliencia y un crecimiento sostenible ante el aumento de la escasez de agua y el cambio clim¨¢tico. Para conseguirlo, se necesitan avances inmediatos en tres v¨ªas paralelas a la seguridad h¨ªdrica, que incluyen el aumento de la inversi¨®n en informaci¨®n, infraestructura e instituciones.

La informaci¨®n y los datos

La creciente escasez de agua hace que sea imprescindible saber qu¨¦ lugares disponen de agua y cu¨¢les no, y de qu¨¦ manera se utiliza. Para ello, el Instituto Internacional del Manejo del Agua y sus socios han desarrollado y aplicado de manera generalizada el enfoque de la ¡°contabilidad de los recursos h¨ªdricos¡±.⁶ Esto ayuda a definir un balance h¨ªdrico sostenible y, en consecuencia, proporciona una base emp¨ªrica para la gobernanza equitativa y transparente de los recursos h¨ªdricos. Al utilizar un sistema normalizado de recopilaci¨®n de datos y unas normas de calidad, el enfoque integra los procesos hidrol¨®gicos con el uso de la tierra, as¨ª como el consumo y el caudal de agua en cuencas fluviales enteras.

Debemos ser capaces tambi¨¦n de predecir y prepararnos frente a las circunstancias extremas y los riesgos relativos al agua. Debido a la probabilidad de que aumente la variabilidad en el abastecimiento de agua, los pa¨ªses necesitan buenas herramientas de informaci¨®n para evaluar y controlar estos riesgos. Asia Meridional es una regi¨®n de especial relevancia, ya que cuenta con la mayor concentraci¨®n de riesgos relacionados con el agua. Un an¨¢lisis reciente sobre la exposici¨®n a los riesgos en esta regi¨®n muestra que unos 750 millones de personas ¡ªm¨¢s del 45% de la poblaci¨®n total¡ª se vieron afectadas por los riesgos clim¨¢ticos en la d¨¦cada posterior al 2000.⁷

Para que las autoridades locales y nacionales mitiguen los efectos de estos riesgos de una manera equitativa y eficaz, necesitan un acceso f¨¢cil a los datos en tiempo casi real en condiciones de humedad. En un intento de proporcionar este tipo de informaci¨®n, el Instituto Internacional del Manejo del Agua desarroll¨® hace unos a?os el South Asia Drought Monitoring System (SADMS).⁸ El sistema en l¨ªnea ofrece cada semana un mapa de las condiciones de sequ¨ªa de la regi¨®n, utilizando ¨ªndices de ¨²ltima generaci¨®n e im¨¢genes gratuitas obtenidas por sat¨¦lite para proporcionar evaluaciones locales sobre los efectos de la sequ¨ªa en la agricultura. El Instituto Internacional del Manejo del Agua tambi¨¦n est¨¢ trabajando con sus colegas del Indian Council of Agricultural Research (ICAR) para probar un sistema de alerta temprana de sequ¨ªas en los Estados del sur de la India. El sistema incluye varios ¨ªndices basados en datos sobre la temperatura, las precipitaciones y la velocidad del viento, y est¨¢ dise?ado para ofrecer cada 16 d¨ªas una proyecci¨®n de los cambios en la humedad del suelo, lo que sirve como indicador de la posibilidad de sequ¨ªa.

Una mente abierta con respecto a la infraestructura

Para disminuir los riesgos asociados al aumento de la variabilidad de la disponibilidad del agua, se necesitar¨¢ m¨¢s infraestructura natural y construida para almacenar y suministrar agua y para protegerse de las sequ¨ªas y las inundaciones.

El enfoque tradicional para generar mayores beneficios a partir del agua limitando los riesgos se ha centrado a lo largo de la historia en la inversi¨®n en infraestructura construida o ¡°gris¡±, como presas, diques o embalses. Un posible inconveniente es que la construcci¨®n de grandes presas puede comportar costes excesivamente altos por los efectos negativos que comporta para los servicios de los ecosistemas que dependen del agua y para las personas, sobre todo en las comunidades rurales pobres, cuyos medios de subsistencia est¨¢n estrechamente relacionados con estos servicios.

En los ¨²ltimos a?os, la investigaci¨®n para el desarrollo en ?frica y Asia ha acentuado el potencial de la infraestructura natural o ¡°verde¡± como opci¨®n adicional para reforzar la adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico y el crecimiento sostenible. Los pantanos, los lagos, los acu¨ªferos e incluso los suelos se pueden utilizar para almacenar agua, mientras que las llanuras aluviales, los humedales y los manglares pueden servir para la protecci¨®n frente a inundaciones. Una de las t¨¦cnicas, denominada gesti¨®n de la recarga de acu¨ªferos, puede servir para ambos prop¨®sitos. El Instituto Internacional del Manejo del Agua est¨¢ realizando pruebas en la India para ayudar a reducir las inundaciones mediante la recogida del agua que sobra durante la estaci¨®n de los monzones y el uso de esa agua para recargar los acu¨ªferos de forma estrat¨¦gica y ponerla a disposici¨®n de la poblaci¨®n para el riego en la estaci¨®n seca.⁹

Las soluciones basadas en la naturaleza tambi¨¦n pueden mantener los ecosistemas y el patrimonio natural y, a su vez, realzar los valores est¨¦ticos y recreativos. Esta atenci¨®n a las soluciones basadas en la naturaleza reconoce que la infraestructura gris por s¨ª sola no puede cumplir los objetivos de desarrollo y los objetivos medioambientales ante el cambio clim¨¢tico y otras presiones.

Para cumplir la promesa de un enfoque mixto, debemos justificar con argumentos s¨®lidos la inversi¨®n en carteras que comprendan tanto la infraestructura construida como la natural, que proceden de evaluaciones cient¨ªficas sobre su valor social, econ¨®mico y medioambiental. Este es el objetivo principal de un proyecto que se centra en la cuenca fluvial del r¨ªo Tana, en Kenya, y la cuenca fluvial del r¨ªo Volta, en ?frica Occidental, dirigido por la Uni¨®n Internacional para la Conservaci¨®n de la Naturaleza (UICN). Una investigaci¨®n realizada por el Instituto Internacional del Manejo del Agua y otros socios del proyecto ha demostrado que la infraestructura natural de estas cuencas ofrece varias ventajas y ha establecido su valor econ¨®mico, el cual representa a cientos de miles de personas.¹⁰

El D¨ªa Mundial del Agua 2018, con el lema ¡°La respuesta est¨¢ en la naturaleza¡±, har¨¢ m¨¢s ¨¦nfasis en las soluciones basadas en la naturaleza para evaluar los desaf¨ªos del agua.

Un compromiso con la innovaci¨®n institucional

La adaptaci¨®n al aumento de la escasez de agua y la variabilidad relacionada con el cambio clim¨¢tico supondr¨¢ grandes exigencias para las instituciones, generalmente definidas como las organizaciones, pol¨ªticas, normas, pr¨¢cticas e intereses que regulan el agua. La mejora de la gobernanza del agua para cumplir los objetivos sociales, econ¨®micos y medioambientales ser¨¢ un desaf¨ªo fundamental para las instituciones del Decenio Internacional para la Acci¨®n, ¡°Agua para el Desarrollo Sostenible¡±, 2018-2028.

Se necesitar¨¢n innovaciones institucionales para volver a ajustar la distribuci¨®n hist¨®rica del agua y las pr¨¢cticas de gesti¨®n con el aumento de la demanda de agua, el cambio en las econom¨ªas y en los datos demogr¨¢ficos, as¨ª como la evoluci¨®n de las prioridades sociales. Las instituciones tendr¨¢n que ser m¨¢s flexibles y adaptables para poder responder de manera satisfactoria a las incertidumbres generadas por el cambio clim¨¢tico. Deber¨¢n ser tambi¨¦n m¨¢s transparentes y participativas si quieren garantizar la inclusi¨®n de los grupos desfavorecidos y de las mujeres.

Un nuevo car¨¢cter urgente

En la ¨²ltima d¨¦cada, han aumentado las preocupaciones por las amenazas relacionadas con el agua para el crecimiento sostenible y este es, sin duda, un cambio bien recibido. Durante los pr¨®ximos a?os, nuestro desaf¨ªo consistir¨¢ en responder de manera eficaz a las crecientes preocupaciones relativas al agua a trav¨¦s de iniciativas basadas en la ciencia que puedan garantizar que hay agua suficiente, que se gestiona atentamente y que se distribuye de manera equitativa. Este es el esp¨ªritu del Decenio Internacional para la Acci¨®n, ¡°Agua para el Desarrollo Sostenible¡±, que imprime un nuevo car¨¢cter de urgencia a nuestros esfuerzos por gestionar el agua de una forma m¨¢s inteligente.

Notas

1. David Molden, ed., Water for Food, Water for Life: A Comprehensive Assessment of Water Management in Agriculture. Summary (Londres, Reino Unido, Earthscan y Colombo, Sri Lanka, Instituto Internacional del Manejo del Agua, 2007). Disponible en .
2. Foro Econ¨®mico Mundial, The Global Risks Report 2016, 11? ed. (Ginebra, Suiza, 2016). Disponible en .
3. Ibid., p¨¢g. 6.
4. Maarten de Wit y Jacek Stankiewicz, ¡°Changes in surface water supply across Africa with predicted climate change¡±, Science, vol. 311, n¨²m. 5769 (31 de marzo de 2006), p¨¢gs. 1917-1921. Disponible en .
5. Claudia W. Sadoff et al., Securing Water, Sustaining Growth: Report of the GWP/OECD Task Force on Water Security and Sustainable Growth (Oxford, Reino Unido, University of Oxford, 2015). Disponible en .
6. Instituto Internacional del Manejo del Agua et al., Water Accounting. Independent estimates of water flows, fluxes, stocks, consumption, and services. Disponible en (consultado el 1 de febrero de 2018).
7. Giriraj Amarnath et al., Mapping Multiple Climate-related Hazards in South Asia. Informe de investigaci¨®n 170 del Instituto Internacional del Manejo del Agua (Colombo, Sri Lanka, Instituto Internacional del Manejo del Agua, 2017), p¨¢g. vii. Disponible en .
8. Instituto Internacional del Manejo del Agua, South Asia Drought Monitoring System (SADMS). Disponible en (consultado el 1 de febrero de 2018).
9. Paul Pavelic et al., Controlling Floods and Droughts through Underground Storage: From Concept to Pilot Implementation in the Ganges River Basin. Informe de investigaci¨®n 165 del Instituto Internacional del Manejo del Agua (Colombo, Sri Lanka, Instituto Internacional del Manejo del Agua, 2015). Disponible en .
10. CGIAR Research Program on Water, Land and Ecosystems (WLE), Re-conceptualizing Dam Design and Management for Enhanced Water and Food Security (Colombo, Sri Lanka, Instituto Internacional del Manejo del Agua, 2017), CGIAR Research Program on Water, Land and Ecosystems (WLE), WLE Towards Sustainable Intensification: Insights and Solutions, informe 3. Disponible en .