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La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Clim¨¢tico (COP26) celebrada en Glasgow reuni¨® a 120 l¨ªderes mundiales y m¨¢s de 40.000 participantes inscritos, entre los que se inclu¨ªan 22.274 delegados de las partes, 14.124 observadores y 3.886 representantes de los medios. Durante dos semanas, la atenci¨®n del mundo se ha centrado en todos los aspectos del cambio clim¨¢tico: los fundamentos cient¨ªficos, las soluciones, la voluntad pol¨ªtica de tomar medidas y las indicaciones claras para la acci¨®n por el clima.

Los resultados de la COP26 (el ) son el fruto de las intensas negociaciones sostenidas entre cerca de 200 pa¨ªses a lo largo de las dos semanas, el arduo trabajo, formal e informal, de varios meses y una interacci¨®n constante, tanto virtual como presencial, durante casi dos a?os.

¡°Los textos aprobados constituyen un compromiso,¡± afirmaba Ant¨®nio Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas. ¡°Reflejan los intereses, las condiciones, las contradicciones y la voluntad pol¨ªtica en el mundo actual. Suponen un paso importante, pero, desgraciadamente, la voluntad pol¨ªtica colectiva no ha sido suficiente para superar algunas contradicciones fuertemente arraigadas.¡±

La reducci¨®n de las emisiones globales de gases de efecto invernadero sigue estando muy por debajo de lo necesario para preservar un clima habitable, y el apoyo a los pa¨ªses m¨¢s vulnerables afectados por los efectos del cambio clim¨¢tico contin¨²a siendo insuficiente. No obstante, la COP26 proporciona nuevos cimientos para afianzar la implementaci¨®n del Pacto de Par¨ªs mediante acciones que permitan al mundo encaminarse hacia un futuro m¨¢s sostenible y con bajas emisiones de carbono.

?Qu¨¦ se ha acordado?

Reconocimiento de la emergencia. Los pa¨ªses reafirmaron el objetivo del Pacto de Par¨ªs de limitar el incremento de la temperatura media mundial a 2 ¡ãC por encima del nivel preindustrial y esforzarse por no superar 1,5 ¡ãC. Adem¨¢s, expresaron la ¡°alarma y m¨¢xima preocupaci¨®n en relaci¨®n con las actividades humanas que han provocado un incremento de 1,1 ¡ãC en las temperaturas hasta la fecha, los efectos del cual ya se aprecian en todas las regiones, y con que los presupuestos de carbono actuales destinados a alcanzar el objetivo de temperatura del Pacto de Par¨ªs son poco ambiciosos y se exceden r¨¢pidamente¡±. Reconocieron que la repercusi¨®n del cambio clim¨¢tico ser¨¢ mucho menor con un incremento de la temperatura de 1,5 ¡ãC que de 2 ¡ãC.

Intensificaci¨®n de la acci¨®n por el clima. Los pa¨ªses subrayaron la urgencia de actuar ¡°en esta d¨¦cada cr¨ªtica¡±, en la que las emisiones de di¨®xido de carbono deben reducirse un 45 % con el fin de alcanzar las emisiones netas cero para mediados de siglo. Los planes clim¨¢ticos actuales, las contribuciones determinadas a nivel nacional, no obstante, son de car¨¢cter poco ambicioso, por lo que el Pacto de Glasgow para el Clima insta a los pa¨ªses a presentar planes nacionales m¨¢s en¨¦rgicos el pr¨®ximo a?o, en lugar de en 2025, que era el momento previsto. Los pa¨ªses tambi¨¦n solicitaron a la CMNUCC que realizara un informe de s¨ªntesis de las contribuciones determinadas a nivel nacional para evaluar el nivel actual de ambici¨®n.

Abandono de los combustibles f¨®siles. En la que quiz¨¢s sea la decisi¨®n m¨¢s controvertida de Glasgow, los pa¨ªses acabaron por acordar una disposici¨®n por la que se pide la reducci¨®n del carb¨®n como fuente de energ¨ªa y la eliminaci¨®n gradual de los subsidios ¡°ineficientes¡± a los combustibles f¨®siles, dos aspectos cruciales que nunca antes se hab¨ªan mencionado expl¨ªcitamente en las decisiones adoptadas en las conversaciones de las Naciones Unidas en materia de cambio clim¨¢tico, pese a que el carb¨®n, el petr¨®leo y el gas son los principales causantes del calentamiento global. Diversos pa¨ªses y ONG expresaron su descontento por que los t¨¦rminos relativos al carb¨®n se hubieran suavizado significativamente (de eliminar a reducir gradualmente) y, por tanto, no fueran tan ambiciosos como deber¨ªan.

¹ó¾±²Ô²¹²Ô³¦¾±²¹³¦¾±¨®²Ô para la acci¨®n clim¨¢tica. Los pa¨ªses desarrollados llegaron a Glasgow sin haber cumplido su promesa de proporcionar a los pa¨ªses en desarrollo 100.000 millones de USD al a?o. Los resultados de Glasgow, una expresi¨®n de arrepentimiento, reafirman la promesa y urgen a los pa¨ªses desarrollados a facilitar los 100.000 millones de USD anuales con car¨¢cter de urgencia. En un informe, los pa¨ªses desarrollados expresaron su confianza de que dicho objetivo de financiaci¨®n se alcanzar¨¢ en 2023.

Incremento del apoyo a la adaptaci¨®n. El Pacto de Glasgow reclama que se doble la financiaci¨®n para apoyar a los pa¨ªses en desarrollo en la adaptaci¨®n ante los efectos del cambio clim¨¢tico y el fortalecimiento de la resiliencia. De esta forma, no se cubren todos los fondos que los pa¨ªses m¨¢s pobres necesitan, pero se aumenta significativamente la financiaci¨®n para proteger vidas y medios de subsistencia, lo que a d¨ªa de hoy representa solo alrededor del 25 % de todos los fondos relacionados con el clima (mientras que el 75 % se destina a tecnolog¨ªas verdes para disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero). En Glasgow, tambi¨¦n se estableci¨® un programa de trabajo para determinar un objetivo global en materia de adaptaci¨®n en el que se definan las necesidades y soluciones colectivas en relaci¨®n con la crisis clim¨¢tica, que ya afecta a numerosos pa¨ªses.

Compleci¨®n de las normas de aplicaci¨®n del Acuerdo de Par¨ªs. Los pa¨ªses llegaron a un acuerdo sobre las cuestiones pendientes en lo tocante a las normas de aplicaci¨®n del Acuerdo de Par¨ªs, los detalles operativos para la implementaci¨®n pr¨¢ctica del citado Acuerdo de Par¨ªs. Entre ellas se incluyen las normas relacionadas con los mercados del carbono, que permiten a los pa¨ªses con dificultades para alcanzar sus objetivos de emisiones comprar reducciones de otros estados que ya han superado sus propios objetivos. Tambi¨¦n se llevaron a t¨¦rmino negociaciones sobre un marco de transparencia reforzado, donde se estipulan plazos comunes y formatos acordados para que los pa¨ªses informen peri¨®dicamente sobre sus avances, con el objetivo de fomentar la confianza en que todos los pa¨ªses contribuyen al esfuerzo mundial.

Atenci¨®n a las p¨¦rdidas y da?os. Al reconocer que el cambio clim¨¢tico cada vez afecta m¨¢s a las personas, especialmente en los pa¨ªses en desarrollo, los pa¨ªses acuerdan fortalecer una red (la Red de Santiago) que conecte a los pa¨ªses vulnerables con proveedores de asistencia t¨¦cnica, conocimientos y recursos para hacer frente a los riesgos clim¨¢ticos. Adem¨¢s, presentaron un nuevo ¡°Di¨¢logo de Glasgow¡± para abordar los acuerdos de financiaci¨®n para actividades destinadas a evitar, reducir al m¨ªnimo y afrontar las p¨¦rdidas y los da?os relacionados con los efectos adversos del cambio clim¨¢tico.

Nuevos pactos y anuncios

La COP26 produjo muchos otros pactos y anuncios (al margen del Pacto de Glasgow por el Clima) cuya aplicaci¨®n puede entra?ar importantes efectos positivos. Entre ellos se incluyen: 

Bosques. 137 pa¨ªses dieron un paso hist¨®rico al comprometerse a detener y revertir la p¨¦rdida de bosques y la degradaci¨®n de las tierras de aqu¨ª a 2030. Esta promesa est¨¢ respaldada por 12.000 millones de USD de dinero p¨²blico y 7.200 millones de USD de financiaci¨®n privada. Adem¨¢s, los directores generales de m¨¢s de 30 instituciones financieras, con m¨¢s de 8,7 billones de USD en activos internacionales, se comprometieron a eliminar las inversiones en actividades relacionadas con la deforestaci¨®n.  

Metano. 103 pa¨ªses, 15 de ellos grandes emisores, se adhirieron al Global Methane Pledge (Compromiso Global por el Metano), cuyo objetivo es limitar las emisiones de metano en un 30 % (en relaci¨®n con los niveles de 2020) de aqu¨ª a 2030. El metano, uno de los gases que m¨¢s contribuyen al efecto invernadero, es responsable de un tercio del calentamiento actual derivado de actividades humanas.

Coches. M¨¢s de 30 pa¨ªses, seis importantes fabricantes de veh¨ªculos y otros agentes, como las ciudades, expresaron su determinaci¨®n de que todas las ventas de coches y furgonetas nuevos sean de veh¨ªculos de emisiones cero para 2040 a nivel internacional y para 2035 en los mercados l¨ªderes, lo que acelerar¨¢ la descarbonizaci¨®n del transporte por carretera, actual responsable de alrededor del 10 % de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.

°ä²¹°ù²ú¨®²Ô. L¨ªderes de Sud¨¢frica, Reino Unido, los Estados Unidos, Francia, Alemania y la Uni¨®n Europea anunciaron una innovadora asociaci¨®n para apoyar a Sud¨¢frica, el productor de electricidad con mayor ¨ªndice de emisiones de carbono del mundo, con 8.500 millones de USD a lo largo de los pr¨®ximos 3-5 a?os para que pueda hacer una transici¨®n justa hacia una econom¨ªa con bajas emisiones de carbono y abandonar el carb¨®n.

¹ó¾±²Ô²¹²Ô³¦¾±²¹³¦¾±¨®²Ô privada. Las instituciones financieras privadas y los bancos centrales anunciaron movimientos para reconducir miles de millones de d¨®lares hacia el objetivo de lograr las emisiones netas cero a nivel global. Entre ellos, se cuenta la Glasgow Financial Alliance for Net Zero, que re¨²ne a m¨¢s de 450 empresas de 45 pa¨ªses, con 130 billones de USD en activos, y que requiere a sus miembros el establecimiento de objetivos s¨®lidos, basados en la ciencia y a corto plazo.