A través de un festival de música y comida en Santiago de Chile, Elba rinde homenaje a su herencia cultural del mientras ayuda a promover el encuentro entre las personas refugiadas y la sociedad chilena.
ACNUR
Escribir una postal es algo que ya casi nadie hace, pero, para seis en Venezuela, este gesto es una manera de conectar con sus orígenes y vivencias. Misivas cargadas de sufrimiento, reivindicando su presente, sus aportes a las comunidades que les acogen, sus logros y los anhelos para el futuro. ACNUR te presenta las historias de Viki, Cloe, Carlos, Flor, Alexander y Lisbeth.
En Táchira, al noroeste de , los residentes de la casa hogar "Los Abuelos de Jesús" para vulnerables se mantienen activos y producen alimentos. Todo gracias a un huerto autogestionado que funciona con el apoyo de ACNUR y sus socios. “Qué manera tan bonita de sentir que uno todavía sirve pa’ algo”, dice Silvestre Pernia, residente del centro.
Gracias a un proyecto de ACNUR, más de 300 instituciones educativas en Colombia se comprometen con la inclusión e integración de niñas, niños y jóvenes que se ha visto obligados a dejar sus hogares.
Los desplazados y apátridas luchan por detener el cambio climático, alcanzar la igualdad de género y resolver y globales. ACNUR te presenta 17 ejemplos que nos inspiran a todos.
Los refugiados para recibir ayuda esencial , tiendas de campaña y kits de cocina. Pero fabricar, empacar, transportar y distribuir esos artículos tiene un costo medioambiental. Desde el rediseño de los artículos que distribuye hasta la minimización de los residuos que genera, ACNUR trabaja para reducir su impacto ambiental.
Con un incremento del 25% de 2021 a 2022, y en un contexto de movilidad humana complejo y desafiante, 1 de cada 5 personas en el mundo necesitadas de protección y asistencia se encuentra en las Américas. ACNUR trabaja para aliviar las carencias de en 26 países de la región, siendo Colombia, Costa Rica, Honduras y Brasil los estados con más necesidades. Aun así, a finales de julio, solo se había alcanzado a cubrir un tercio de las peticiones financieras de .
Las obras de Édgar Álvarez son expuestas por todo el mundo. Ahora presenta en Bogotá (Colombia) un proyecto donde utiliza creaciones de plastilina para retratar la vida cotidiana de
Seis meses después de perderlo todo durante los devastadores terremotos que azotaron el sudeste de Türkiye, una familia de refugiados sirios rehace su vida en la ciudad española de Sevilla.
Helena huyó con sus hijos tras recibir amenazas en Colombia. Su trabajo comunitario por los derechos humanos la puso en la mira. En Ecuador encontró ayuda en un albergue apoyado por ACNUR. 4.200 personas colombianas huyeron a Ecuador en 2022. Más de 2.600 han solicitado protección, a junio de 2023. Ecuador es el país que alberga el mayor número de refugiados colombianos en el mundo, como Helena, quien ahora busca reiniciar su vida sin miedo.
Con el apoyo de , un mecanismo sencillo, ágil y económico ya garantiza el acceso a documentación, brinda protección contra la devolución y facilita el acceso a derechos de la en Ecuador.
Al amanecer, Joachim vierte leche fresca, aún tibia, en un recipiente. Así comienza su rutina diaria como fabricante de queso. Pero su vida no siempre ha sido así. Hoy, gracias a su determinación y esfuerzo, Joachim y su familia, todos en Guatemala, han podido cumplir un sueño y hacer prosperar su negocio de producción de quesos.
Para el próximo año, ONU Refugiados anticipa un importante aumento de las necesidades mundiales de de personas refugiadas en países como Afganistán, Sudán del Sur, Myanmar y R.D. del Congo. Como indica un reciente informe de la organización, ante el recrudecimiento de la crisis de refugiados y la aparición de nuevas situaciones de desplazamiento, 2,4 millones necesitarán ser reasentadas en 2024. Esto es, un aumento del 20 % en comparación con 2023.
trabaja con el fotógrafo Brian Sokol en un proyecto de retratos de refugiados. A través de imágenes y entrevistas, Brian revela algunas de las angustiosas decisiones que enfrentan refugiadas cuando se ven obligadas a huir de sus hogares. Como Abdou Ag Moussa en Mali, que huyó con su familia después de que su madre fuera asesinada.
Tras recibir amenazas contra su vida por su , José tuvo que huir de Honduras. Llegó caminando a Guatemala, donde ACNUR lo identificó como persona muy vulnerable y lo ayudó a reasentarse en un nuevo país.