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Cap¨ªtulo IV. Conclusi¨®n

Secretario General Ant¨®nio Guterres hablando con ni?os en edad escolar durante una visita al campo de refugiados de Zaatari en Jordania. Foto: ONU/Sahem Rababah

La presente Memoria ofrece un panorama de la labor de la Organizaci¨®n en un mundo plagado de problemas contradictorios y complejos. Millones de personas han podido salir de la pobreza, sin embargo, millones m¨¢s se ven amenazadas por la hambruna. La globalizaci¨®n ha tra¨ªdo la prosperidad a muchos, pero otros han quedado cruelmente abandonados, excluidos y atrapados en un sistema de desigualdad y creciente xenofobia. El mundo ha presenciado la migraci¨®n masiva de personas que huyen de conflictos violentos, en una escala sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial, y la innegable megatendencia del cambio clim¨¢tico y sus efectos multiplicadores exigen medidas a nivel mundial sin embargo, se cuestiona el multilateralismo cuando m¨¢s necesitamos dar respuestas globales coherentes a esos fen¨®menos interrelacionados. Ning¨²n pa¨ªs puede resolver esas crisis por s¨ª solo. Las Naciones Unidas constituyen el centro de gravedad del di¨¢logo y la cooperaci¨®n en el empe?o por encontrar soluciones comunes; con su apoyo concentrado, los Estados Miembros llegaron a dos acuerdos hist¨®ricos, la Agenda 2030 y el Acuerdo de Par¨ªs sobre el cambio clim¨¢tico de 2015. Considerados en conjunto, ambos demuestran la voluntad de las naciones de trabajar a nivel multilateral cuando entienden que existe una necesidad imperiosa. Esos acuerdos constituyen una hoja de ruta clara para llegar a un destino com¨²n: cuidar del hogar mundial que todos compartimos.

Las Naciones Unidas deben estar a la altura de ese desaf¨ªo. He presentado una serie de propuestas de reforma para lograr que la Organizaci¨®n sea m¨¢s eficaz, flexible y ¨¢gil y para restablecer la cultura de prevenci¨®n en todas nuestras actividades. En ¨²ltima instancia, las generaciones futuras juzgar¨¢n a las Naciones Unidas por nuestra capacidad de hacer realidad nuestras normas y aspiraciones, sobre todo en favor de quienes m¨¢s sufren. Son las propias Naciones Unidas las que deben demostrar su valor.
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Son las propias Naciones Unidas las que deben demostrar su valor

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