La bandera de la ONU. ? ONU/JC McIlwaine
Doy as¨ª por concluida mi ¨²ltima memoria anual sobre la labor de la Organizaci¨®n. He hecho lo posible por dejar a las Naciones Unidas en mejores condiciones de afrontar los inmensos desaf¨ªos que tienen ante s¨ª y de servir a todos sus miembros y a ?nosotros los pueblos? en todos los rincones del mundo. De esta memoria se desprende claramente que las Naciones Unidas son ahora m¨¢s necesarias que nunca y que es probable que en el futuro lo sean cada vez m¨¢s. La Organizaci¨®n interviene en todas las cuestiones urgentes de inter¨¦s mundial que se plantean en todo el planeta. El pr¨®ximo decenio resultar¨¢ crucial para hacer realidad nuestras promesas de asegurar una vida digna a todos los seres humanos y de librar a las generaciones venideras del flagelo de la guerra y la amenaza del cambio clim¨¢tico irreversible. Aunque debemos llevar adelante la larga serie de reformas en marcha en relaci¨®n con los tres pilares de la Organizaci¨®n, no debemos limitarnos a las reformas en curso. Necesitamos innovaci¨®n, apertura y creatividad constantes a fin de lograr que las Naciones Unidas se mantengan en la vanguardia del cambiante panorama mundial y sigan siendo un foro para la acci¨®n colectiva basada en principios. Aliento a los Estados Miembros a que usen con responsabilidad esta instituci¨®n indispensable, de composici¨®n universal y alcance mundial. Seguir¨¦ colaborando con ellos hasta el ¨²ltimo d¨ªa de mi mandato.