17 octubre 2011

Durante el decenio pasado se produjo un extraordinario crecimiento de las tecnolog赤as de la informaci車n y las comunicaciones (TIC) en todo el mundo. En 1999, Geoffrey Kirkman1 observ車 en una monograf赤a sobre el tema que la mitad de la poblaci車n mundial nunca hab赤a hecho una llamada por tel谷fono1. En 2011 esa situaci車n ha cambiado radicalmente con redes de telefon赤a m車vil que abarcan m芍s del 90% de la poblaci車n del mundo, y se espera que en 2015 m芍s de la mitad de esa poblaci車n est谷 utilizando tel谷fonos m車viles. Si bien persiste la pobreza generalizada en los pa赤ses africanos, en los 迆ltimos a?os la utilizaci車n de la telefon赤a m車vil ha crecido all赤 con m芍s rapidez que en cualquier otra regi車n del mundo. Se estima que actualmente hay 500 millones de abonados a la telefon赤a m車vil en todo el continente, frente a 246 millones en 2008. A finales de 2010 ?frica superaba a Europa Occidental en el n迆mero de conexiones de telefon赤a m車vil. Por a?adidura, aunque ?frica muestra retraso en otras formas de utilizaci車n de las TIC, y se estima que el n迆mero de usuarios de Internet es de 100 millones, entre 2000 y 2011 el crecimiento de la utilizaci車n de Internet fue de m芍s de 2.000%, lo que representa m芍s de cinco veces el del resto del mundo.

El fenomenal incremento del acceso a las TIC se ha visto acompa?ado por una literatura cada vez m芍s amplia sobre la contribuci車n de estas tecnolog赤as al crecimiento econ車mico, el desarrollo y la reducci車n de la pobreza. De acuerdo con los criterios m芍s optimistas, se han descrito las TIC como los medios por los que los pa赤ses en desarrollo pueden vencer etapas del desarrollo y barreras tecnol車gicas para alcanzar tanto el crecimiento econ車mico como un desarrollo de base amplia. Otros criterios menos optimistas al atribuir beneficios directos a las TIC, plantean preocupaciones respecto de que una promoci車n en谷rgica y unidimensional para aumentar su utilizaci車n podr赤a aumentar tambi谷n la dependencia de los pa赤ses m芍s pobres al igual que la brecha entre las zonas urbanas y rurales, los ricos y los pobres y entre las generaciones. De ah赤 que, si bien es muy posible que exista un v赤nculo entre las TIC y la reducci車n de la pobreza, a迆n no se comprenden del todo los mecanismos por los cuales tiene lugar esa conexi車n. En realidad, cualquiera que sea la dimensi車n del cambio de bienestar que se considere, la direcci車n de su v赤nculo causal con las TIC es una cuesti車n pol谷mica. Los problemas de causalidad inversa y falsa correlaci車n aplicables a la relaci車n entre cualquier inversi車n en infraestructura y un mayor rendimiento son igualmente pertinentes cuando se analiza el v赤nculo entre las TIC y la pobreza.

Incluso antes de la actual era de utilizaci車n generalizada de la telefon赤a m車vil y de Internet, se descubri車 una relaci車n causal entre la infraestructura de telecomunicaciones y el rendimiento econ車mico utilizando datos de los 21 pa赤ses miembros de la Organizaci車n de Cooperaci車n y Desarrollo Econ車micos (OCDE). Tambi谷n se ha encontrado esta relaci車n con respecto a la telefon赤a m車vil partiendo de datos de 113 pa赤ses correspondientes a un per赤odo de 20 a?os, que demostraron que un aumento de 1% en la tasa de penetraci車n de las telecomunicaciones da por resultado un 0,03% de aumento del producto interno bruto (PIB) (Torero y von Braun, 2006).2 Esta correlaci車n positiva entre las TIC y el crecimiento econ車mico se extiende al mundo en desarrollo mediante gastos directos en infraestructura y servicios de TIC, y tambi谷n mediante sus multiplicadores econ車micos. Se estima que los proveedores de redes m車viles han invertido m芍s de 90.000 millones de d車lares en ?frica, y en algunos pa赤ses constituyen actualmente las empresas m芍s lucrativas e importantes generadoras de empleo. Hoy d赤a los ingresos y los gastos por concepto de telecomunicaciones aportan, por t谷rmino medio, el 7% del PIB en muchas econom赤as africanas, mientras que la inversi車n en comunicaciones ha llegado al 5% aproximadamente de la inversi車n total en el continente. La ampliaci車n de las TIC a nivel mundial tambi谷n ha tenido repercusiones en lo relativo a materias primas mediante sus componentes y manufacturas. El oro, el t芍ntalo, el esta?o y el tungsteno se utilizan para fabricar tel谷fonos m車viles y otros dispositivos de TIC, mientras que el cobalto es un importante componente utilizado para recargar las bater赤as. Zambia y la Rep迆blica Democr芍tica del Congo suministran la materia prima utilizada para m芍s de la mitad de las bater赤as de ion-litio recargables de todo el mundo.

Las TIC pueden tener tambi谷n una repercusi車n m芍s amplia en el desarrollo y son potentes instrumentos para el empoderamiento y la generaci車n de ingresos, as赤 como para mejorar el acceso a la educaci車n y a otros servicios sociales. Se ha comprobado que los tel谷fonos m車viles benefician a los empresarios de la econom赤a no estructurada al ayudarlos a atraer nuevos negocios, y un ejemplo muy conocido de utilizaci車n de tel谷fonos m車viles por los pescadores del estado de Kerala (India) ha mostrado los beneficios que reporta a productores y consumidores la mejora de la informaci車n y un mejor funcionamiento de los mercados (Jensen, 2007).3 Otros estudios van m芍s lejos y se?alan que el papel de las TIC no se limita a promover el crecimiento, sino que tambi谷n incluye dimensiones del desarrollo no relacionadas con el ingreso, como el empoderamiento y la seguridad, incluidas las oportunidades de gobernanza electr車nica y mejora de la rendici車n de cuentas.

Con todo, no hay garant赤a de que las TIC tendr芍n un impacto positivo en la reducci車n de la pobreza. En su an芍lisis, Torero y von Braun (2006) muestran que el acceso a las TIC depende del ingreso, la educaci車n y los recursos, y que la llamada brecha digital es parte de una brecha en el desarrollo mucho m芍s amplia. Aducen que el desarrollo socioecon車mico contribuye a una mayor utilizaci車n de las TIC y no a la inversa. La alfabetizaci車n en materia de TIC tambi谷n es importante para determinar el acceso a esas tecnolog赤as y su utilizaci車n. No se circunscribe a la ense?anza acad谷mica, sino que abarca las tareas cognitivas impl赤citas en la formulaci車n de preguntas, la soluci車n de problemas y la aplicaci車n de conocimientos (Warschauer, 2004).4 La expansi車n de las TIC tambi谷n puede tener resultados negativos directos. Se ha demostrado que los gastos en tecnolog赤as de este tipo dan lugar a conflictos en los hogares, fomentan el control de los recursos por parte del hombre de la casa y desv赤an los recursos del hogar, que se dejan de invertir en alimentos y otros bienes esenciales. De hecho, se han planteado preocupaciones relacionadas con los derechos humanos que tienen que ver con el posible uso de minerales procedentes de zonas de conflicto en la manufactura de dispositivos de TIC, as赤 como con la posible utilizaci車n de mano de obra infantil. Al igual que cualquier otra tecnolog赤a, las TIC deben situarse en el contexto de las capacidades y necesidades locales, y requieren una econom赤a pol赤tica s車lida junto con la voluntad pol赤tica de asignar prioridad a los problemas de desarrollo.

El d谷ficit de informaci車n sobre el efecto de las TIC en la reducci車n de la pobreza ha suscitado preocupaci車n entre los encargados de formular pol赤ticas, a quienes se insta una y otra vez a invertir una parte importante del presupuesto nacional en infraestructura para esas tecnolog赤as tomando como base pruebas incompletas. En tales circunstancias, tiende a surgir la pregunta de si las inversiones en TIC representan una opci車n v芍lida para las comunidades pobres. En muchos de los estudios existentes se observa el error com迆n de reunir datos a un nivel demasiado general y pasar por alto los datos microecon車micos que se requieren para interpretar las tendencias macroecon車micas. Puesto que los cambios en el bienestar de las personas y los hogares no guardan necesariamente una relaci車n directa con los cambios de la producci車n econ車mica a nivel nacional, es importante ir m芍s all芍 del nivel nacional de crecimiento y desarrollo y analizar el papel y la repercusi車n de las TIC en la reducci車n de la pobreza a un micronivel. En respuesta a esta necesidad de comprender mejor el v赤nculo entre las TIC y la pobreza a nivel microecon車mico, el proyecto Poverty, ICT in Urban and Rural East Africa (PICTURE-Africa) es una iniciativa de investigaci車n durante cuatro a?os financiada por el Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo y ejecutada por un consorcio de investigadores en ?frica Oriental y ?frica Meridional. Vali谷ndose de una singular base de informaci車n que consta de tablas de conexiones de datos obtenidos de hogares de Kenya, Rwanda, Tanzan赤a y Uganda en 2007, y de nuevo en 2010, PICTURE-Africa proporciona informaci車n sobre las desigualdades en el acceso a las TIC en ?frica Oriental y sobre los obst芍culos que impiden un acceso mejor y m芍s equitativo. Se demostr車 que las probabilidades de acceso a las TIC se duplican con creces como resultado de mejoras del ingreso, y tambi谷n que un a?o m芍s de educaci車n aumentaba las probabilidades de acceso en alrededor del 30%. Por otra parte, se comprob車 que residir en zonas rurales y ser mujer reduc赤a notablemente las posibilidades de acceder a las TIC, en aproximadamente el 50%. Estas relaciones no cambiaron significativamente en las dos fases del estudio, lo que sugiere cierta parcialidad respecto de qui谷n se beneficia del acceso a estas tecnolog赤as. Se observ車 que los hogares y las personas que no tienen TIC son persistentemente m芍s pobres en cuanto a capital financiero, f赤sico y humano. El an芍lisis del v赤nculo causal entre dichas tecnolog赤as y la reducci車n de la pobreza indica que existe un beneficio peque?o de las TIC, pero positivo, para el grupo m芍s pobre, y que, en particular, la disponibilidad de tel谷fonos m車viles es un instrumento potencialmente valioso para mejorar el sustento de las personas muy pobres a mediano plazo (de 6 a 10 a?os).

El r芍pido crecimiento de la utilizaci車n de tel谷fonos m車viles en los pa赤ses en desarrollo refleja una convergencia al menos en este aspecto del desarrollo. Las evidencias que proporcionan estudios como PICTURE-Africa sugieren que es posible que los beneficios econ車micos de este crecimiento se est谷n acumulando m芍s r芍pidamente entre los pobres. De ser as赤, ello significa que el acceso a las TIC podr赤a ser beneficioso no solo para la reducci車n de la pobreza, sino realmente favorable para los pobres con respecto a la distribuci車n de esos beneficios. No obstante, debe reconocerse que las TIC solo ofrecen una oportunidad y no son una panacea. En lugar de reportar beneficios incondicionales a los pobres, parece probable que su impacto vendr芍 determinado por el contexto en que se desplieguen, el grado de preparaci車n de los usuarios y las oportunidades que existan para su aplicaci車n. Por consiguiente, el acceso a la informaci車n mediante las TIC no es solo una cuesti車n de conectividad, sino tambi谷n de capacidad para utilizar los nuevos instrumentos y los contenidos pertinentes proporcionados de manera accesible y 迆til. Se necesitan mejores pol赤ticas y mejor aplicaci車n para lograr un sector de telecomunicaciones mundiales que facilite una tasa de acceso m芍s r芍pida a menor costo. Esto debe ir acompa?ado del aumento de los recursos asignados para desarrollar la alfabetizaci車n en materia de TIC y mejorar la reglamentaci車n de las empresas por las que se facilita el acceso a estas tecnolog赤as.

Notas

1 Kirkman, G. (1999). It's More Than Just Being Connected. A Discussion of Some Issues of Information Technology and International Development. Seminario sobre comercio electr車nico para el desarrollo. Laboratorio de Medios de Comunicaci車n, Massachusetts Institute of Technology. Cambridge, Massachusetts.

2 Torero, M. y von Braun, J. (2006). Information and Communication Technologies for Development and Poverty Reduction: The Potential of Telecommunications. Washington, Johns Hopkins University Press e IFPRI.

3 Jensen, R. (2007). "The Digital Provide: Information (Technology), market performance, and welfare in the South Indian fisheries sector." The Quarterly Journal of Economics 121(3): p芍gs. 879 a 924.

4 Warschauer, M. (2004). Technology and social inclusion: Rethinking the digital divide. Massachusetts, The MIT Press.

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