“Los impactos del clima y el tiempo son altamente percibidos en condiciones extremas como: fuertes lluvias, nevadas, sequías, olas de calor, olas de frío y tormentas, incluyendo las tormentas tropicales y los ciclones. Estos fenómenos meteorológicos extremos, tanto individualmente como en conjunto con otros factores, pueden ocasionar más problemas (...). Juntos, estos eventos producen una gran variedad de repercusiones en el sistema humano y natural”, advirtió el Estado del Clima Global 2022, que fue publicado en abril del 2023 por la Organización Meteorológica Mundial.?
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El informe mencionó que “China tuvo la ola de calor más extensa y prolongada desde que se lleva un registro nacional, la cual se extendió desde mediados de junio hasta finales de agosto, y dio como resultado el verano más caluroso que se ha registrado”. Se espera que el clima extremadamente caluroso sea más frecuente e intenso, especialmente en la Región Administrativa de Hong Kong, en donde los efectos serán agravados debido al efecto isla de calor, pues es una ciudad con un alto grado de densidad. Particularmente, los adultos mayores son más vulnerables debido al deterioro de sus funciones fisiológicas.
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Para hacer frente a estos retos, la Universidad China de Hong Kong, que es una institución miembro de la iniciativa Impacto Académico de las Naciones Unidas (UNAI, por sus siglas en inglés), puso en marcha un proyecto innovativo para incorporar el conocimiento científico sobre las altas temperaturas y sus diversas repercusiones en los adultos mayores, a las medidas de respuesta de diferentes sectores mediante un enfoque interdisciplinario. El proyecto reúne expertos de distintos campos académicos de universidades locales, y demás partes interesadas como el gobierno, los profesionales de la construcción y los proveedores de servicios.
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El proyecto de investigación está estructurado en tres áreas. La primera área se centra en el estudio del aumento de las temperaturas y en el desarrollo de datos climáticos de alta resolución. La segunda área examina el entorno construido, el confort térmico y el dise?o de estrategias para mitigar el calor. Finalmente, la tercera área aborda los servicios de apoyo a las personas mayores y la concientización pública. Los resultados de los cuestionarios y entrevistas de grupos de discusión con personas mayores y profesionales de los servicios de atención a la tercera edad muestran que, en general, en Hong Kong falta educación pública sobre los efectos del calor en la salud.
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Además, los resultados de la investigación sobre los ingresos hospitalarios, la tasa de mortalidad, la sensación térmica, y el bienestar mental concluyeron que la temperatura límite para los adultos mayores era de 28-30°C, misma que fue alcanzada frecuentemente durante el periodo estival de junio a agosto en Hong Kong. El profesor Edward NG, líder del proyecto, resaltó la gran diferencia entre la sensación térmica autodeclarada por los adultos mayores y el límite. “Cuando las personas mayores sientan calor, es posible que ya hayamos pasado por alto el mejor momento para protegerlos del calor extremo", declaró.?
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Para salvaguardar la salud y el bienestar de las personas mayores del calor extremo, es fundamental tomar precauciones y aplicar los tratamientos a tiempo. Para aumentar la capacidad de adaptación al calor, el equipo difundió material educativo, incluidos videos, folletos y gráficos sencillos de advertencia para las redes sociales, e impartió charlas sobre salud a adultos mayores. Todos estos recursos educativos y actividades llegaron a más de 1,200 miembros de la comunidad y a más de 400 centros comunitarios para personas mayores, para su posterior distribución, con el fin de sensibilizar y preparar a la población.
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El equipo del proyecto también informó acerca de las consecuencias que el clima caliente extremo ocasiona en la salud, a través de los medios de comunicación. El profesor Edward Ng hizo énfasis en la necesidad de mejorar el entorno construido para mitigar el calor, y así lograr una vida urbana segura, saludable y de largo plazo. “En el caso de unidades con determinadas características de dise?o, la temperatura interior puede ser superior a la exterior en nuestra ciudad," comentó el profesor Ng. A partir de simulaciones con datos climáticos futuros, el equipo del proyecto formuló estrategias para ayudar a los profesionales a mejorar el dise?o de los edificios y la planificación urbana.
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Se han generado conjuntos horarios de datos climáticos para las condiciones típicas de verano y de verano extremadamente caluroso, bajo diferentes escenarios de emisiones de gases de efecto invernadero, y se han puesto a disposición de la industria de la construcción para la modelización del rendimiento de los edificios y la evaluación del confort térmico. Con respecto a las condiciones exteriores, el proyecto desarrolló mapas de riesgo de calor, diurnos y nocturnos, para evaluar la exposición y vulnerabilidad al calor extremo. Identificaron áreas de mayor riesgo de calor para ayudar a los formuladores de políticas y a las ONGs a priorizar los planes de mitigación del calor y los servicios de apoyo comunitario.
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Por ejemplo, la creación de “espacios frescos” y la optimización del dise?o de los parques y espacios públicos con estructuras de sombra serían parte de la solución. De acuerdo con los resultados, el equipo del proyecto recomendó mejorar el sistema de pronóstico meteorológico con alertas especiales sobre el calor prolongado y las temperaturas extremadamente altas para fomentar medidas preventivas. El equipo, cuyo proyecto cuenta con el apoyo del Fondo de Impacto de Investigación del Consejo de Subvenciones de Investigación de Hong Kong, recibió la renovación de su financiación con el objetivo de ampliar su trabajo para estudiar el clima frío extremo y formular recomendaciones.
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Traducido por: Georgina Reyes.
Editado por: Sofía Anaid Villarreal Cruz
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