La inseguridad alimentaria y nutricional es una grave cuestión emergente en las zonas monta?osas de Asia Central, sobre todo en la región autónoma de Gorno-Badakhshan (GBAO, por sus siglas en ruso), en el este de Tayikistán. Para hacer frente a estas cuestiones y en el marco del Objetivo de Desarrollo Sostenible 2: Hambre Cero, en el Instituto de Investigación de las Sociedades de Monta?a (MSRI, por sus siglas en inglés), que forma parte de la , institución miembro de la UNAI, se está trabajando con un amplio abanico de partes interesadas en la investigación del sistema alimentario.

En el MSRI se sirven de su experiencia científica para estudiar los procesos complejos de la superficie terrestre y del medio ambiente que afectan a las sociedades de monta?a. Su objetivo es mejorar la resiliencia y la capacidad de adaptación de dichas comunidades y sus entornos en el contexto del cambio climático y otras tensiones ambientales, que son fundamentales para mejorar la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible. Además, esto último solo es posible mediante una investigación científica sólida y pruebas empíricas que permitan tomar decisiones fundamentadas.

La GBAO es una región con elevaciones superiores a los 2.000 metros, inviernos extremadamente fríos, veranos cálidos y escasas precipitaciones. En esta zona se cultivan trigo, cebada, avena, papas, alfalfa y especies frutales de hoja caduca. La seguridad alimentaria es motivo de preocupación, sobre todo por la escasez?de tierras cultivables y las breves estaciones de crecimiento. En 2017, en un? del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas se alertó de que los niveles de inseguridad alimentaria en la GBAO "superaban sistemáticamente el 20% de la población en el período para el que se disponía de datos".

Además, en un ?de la Misión de Evaluación de Cultivos y Seguridad Alimentaria de la FAO/PMA en Tayikistán en 2020 se advertía de que "en la GBAO, las poblaciones más vulnerables recurrieron a la alternativa más barata: reducir su consumo de alimentos a solo leche y té con pan y mantequilla tres veces al día". La gran altitud y el clima reinante generan características fisiológicas y biológicas únicas en las plantas y los animales locales.

La producción alimentaria en estos entornos es difícil y se necesitan alternativas innovadoras. En las duras condiciones imperantes en la GBAO, uno de los recursos importantes, pero sin explorar, es la energía geotérmica. Tayikistán cuenta con fuentes hidrominerales calientes y cálidas únicas, situadas en el territorio de alta monta?a de la GBAO, con alrededor de 70 fuentes con propiedades físico-químicas y gaseosas exclusivas en el suroeste y sureste de Pamir.

Las aguas geotérmicas son ricas en minerales y existen grandes posibilidades de utilizar estos recursos de agua caliente para fines como calentar invernaderos y así cultivar verduras fuera de temporada para complementar la dieta en invierno. Por otra parte, el agua caliente también puede utilizarse para la calefacción de espacios y la cría de aves de corral en zonas de gran altitud. Para poner en práctica este concepto, el MSRI se asoció con la Universidad Estatal de Khorog y se creó un invernadero geotérmico.

El invernadero en el poblado de Jelondi, en el distrito de Shughnan (3.580 m), se construyó hace tres a?os de manera experimental. Los principales objetivos de este proyecto eran: (1) construir un invernadero productivo con el recurso geotérmico del agua caliente para calentarlo,?(2) evaluar el cultivo de verduras y la cría de aves de corral en invernadero,?y (3) utilizar las tierras marginales y los recursos geotérmicos para la producción alimentaria.

La construcción del invernadero se completó en abril de 2019. La remota ubicación del proyecto, la adquisición y el transporte de los materiales de construcción hasta el lugar, así como la falta de mano de obra técnica y cualificada local, plantearon muchos retos, que al final se resolvieron en su totalidad. "Este tipo de energía tiene un potencial sin explotar", comentó Aziz Ali, investigador del MSRI de la Universidad de Asia Central en Khorog (Tayikistán).

Los resultados demostraron que se pueden cultivar verduras a gran altura utilizando el calor geotérmico. Además, se recolectaron casi 700 kg de verduras en cuatro meses, a pesar de las duras condiciones ambientales. Los resultados de la investigación revelaron que, además de proporcionar una buena fuente de alimentos frescos y nutritivos para las familias, también pueden aumentar los ingresos para mantenerlas. Como parte de este proyecto, también se creó una peque?a granja avícola para criar patos utilizando el calor geotérmico en un estanque.

El resultado inicial fue alentador, ya que las aves alcanzaron un crecimiento y un peso corporal considerables en un mes y medio. "Los resultados revelan que los recursos geotérmicos disponibles de manantiales de agua caliente en las zonas de gran altitud de la GBAO tienen un gran potencial para producir alimentos con costes mínimos durante todo el a?o", se?aló Aziz Ali. "La energía geotérmica es un regalo de la naturaleza y, si se usa adecuadamente, puede servir de apoyo a los medios de vida rurales de las comunidades monta?osas pobres de Asia Central", a?adió el experto.